Carta de un ateo a un religioso.
Últimamente he tenido mucho tiempo libre, así que he decidido aprovecharlo y escribir este pequeño texto, donde tratare de explicar de una manera sencilla, por qué soy como soy y no sigo los lineamientos generales del pensamiento que impone nuestra sociedad conservadora.
Me he dado cuenta de algo, mucha gente religiosa prejuzga a los ateos y dice mil cosas de nosotros: que estamos en contra de la existencia de “dios” porque estamos resentidos con la vida, que nos creemos intelectuales pero que carecemos del entendimiento para entender a una supuesta deidad todopoderosa, que solo nos refugiamos en la ciencia y que carecemos de un pensamiento humanista que nos haga distinguir el bien y el mal, etc. Y en los jóvenes es peor, pues toman al ateísmo como una forma de rebeldía.
Nos juzgan sin conocernos, así que comenzare hablando un poco sobre mí. Por principio de cuentas soy ateo por la simple y sencilla razón de que la idea de la existencia de “dios” me parece bastante absurda y carente de toda lógica.
¿Pero que es “dios”? Ahí radica el principal problema, el cual hace que su supuesta existencia sea algo tan discutido. Hay quien dice que “dios” es el principio creador de las cosas, una forma de energía, las leyes que rigen el universo, la razón, un estado elevado de conciencia, un ideal como la perfección, la justicia o la belleza o un ser antropomorfo capaz de juzgar todo lo que hacemos. Las primeras definiciones son hasta cierto punto comprobables, pues a través del uso del raciocinio nos podemos dar cuenta de su existencia, sin embargo como lo dije antes, el último concepto resulta tan descabellado que no se puede defender.
Si leemos un poco sobre filosofía, nos damos cuenta que hubo pensadores que en el plano ontológico usaron la idea del “dios” para explicar el ser y el origen de las cosas, Aristóteles por ejemplo decía todo podía explicarse por medio de las matemáticas y Heráclito afirmaba que los seres humanos debían seguir una ley natural: la razón.
Como se puede ver estos conceptos de “dios” son muy diferentes a los que nos enseña el Islam o el cristianismo, y nos muestran a “dios” no como un ser de cuentos de hadas que se preocupa por nosotros, que supuestamente nos cuida y nos castiga si hacemos algo mal, este “dios” que nos pintan estos y otros pensadores, se acerca más a la lógico, no puede pensar, no fue creado y es perpetuo, no le importamos porque solo es un orden, esta definición de dios está más acorde a la realidad. Dentro del plano de la metafísica también hay quien afirma que el universo tiene un orden perfecto y también hay quien dice que el universo es un choque de contrarios.
Aunque exista o no exista, según las razones que les expuse con anterioridad, el concepto de “dios” es algo caduco, del cual puede y debería prescindir la humanidad para lograr llegar a mejorar como sociedad.
Hasta aquí quedan claras las razones de mi ateísmo, el cual solo queda ahí, pues reducir toda mi personalidad a negar la existencia de “dios” resultaría tan dogmático como ser seguidor de cualquier religión.
Vengo de una familia católica, y fue educado en está fe, estoy bautizado, hice la primera comunión e inclusive he leído la biblia pues me parece excelente como literatura. Es por eso que conozco la religión católica igual o más que aquellos que dicen serlo, pero no siguen los preceptos de su fe y es por esto precisamente, que aparte de ateo soy antirreligioso.
La religión me parece una cosa terrible, pues no hay nada peor que alguien que no piensa por sí mismo, que no cuestiona y que se minimiza a tal grado de nombrarse convertirse en una oveja que forma parte del rebaño del “todopoderoso”. Eso sin contar que tanto el Islam como la iglesia católica tienen un concepto moralista bastante cerrado que atenta contra las libertades más esenciales.
Es probable que al leer todo lo anterior piense que no tengo un propósito en la vida, que soy solo un simple hombre de ciencia esclavo de la razón, o como me lo dijo alguien en una ocasión “esclavo de no ser esclavo”.
Soy una persona a la que sus pensamientos atormentan constantemente, sonara un poco presuntuoso, pero no falta un día en el que no deje de cuestionarme o criticar algo, e inclusive estuve a punto de estudiar filosofía, pero las cosas no se dieron.
Vengo de una familia de clase asalariada y en mi casa jamás se asomó la cultura por ningún lado, es por eso que ha falta de libros y unos padres que se preocuparan por cultivar mi pensamiento tuve que hacerlo con lo que tenía más a la mano. Entre la televisión, la música, mis experiencias personales y uno que otro libro que compre con el producto de mi trabajo forje mi propia filosofía, un pensamiento al que por su desorden y revoltura me gusta decir que es “de alcantarilla”.
Todo es un caos, nada tiene sentido. El universo se rige por un proceso dialectico, donde la unión de los opuestos y las contradicciones son la cotidianidad, sin embargo el “ser” es la mejor manifestación de la existencia, porque es materia consiente de si y para sí.
El ser humano es un ser que se crea así mismo, más allá de cualquier precepto científico, moral o religioso. Es por eso que toda persona tiene el derecho de hacer lo que se le pegue la gana, siempre y cuando no le quite el derecho a otro de hacer lo mismo.
Podría seguir escribiendo, pero el resultado final sería un escrito bastante tedioso, así que terminare ahí. Solo quiero decir para finalizar esto que los ateos (o al menos la mayoría), somos personas que piensan por sí mismas, con gustos diferentes y filosofías distintas, a los cuales lo único que nos une es eso: que la idea de “dios” nos parece algo ilógico y absurdo.
Se me estaba pasando, no soy un líder moral ni pretendo elevar mi ego haciendo esto, simplemente aprovecho el espacio que tengo, para responder de una vez por todas varias preguntas que los religiosos me han hecho alguna vez en la vida.
Me he dado cuenta de algo, mucha gente religiosa prejuzga a los ateos y dice mil cosas de nosotros: que estamos en contra de la existencia de “dios” porque estamos resentidos con la vida, que nos creemos intelectuales pero que carecemos del entendimiento para entender a una supuesta deidad todopoderosa, que solo nos refugiamos en la ciencia y que carecemos de un pensamiento humanista que nos haga distinguir el bien y el mal, etc. Y en los jóvenes es peor, pues toman al ateísmo como una forma de rebeldía.
Nos juzgan sin conocernos, así que comenzare hablando un poco sobre mí. Por principio de cuentas soy ateo por la simple y sencilla razón de que la idea de la existencia de “dios” me parece bastante absurda y carente de toda lógica.
¿Pero que es “dios”? Ahí radica el principal problema, el cual hace que su supuesta existencia sea algo tan discutido. Hay quien dice que “dios” es el principio creador de las cosas, una forma de energía, las leyes que rigen el universo, la razón, un estado elevado de conciencia, un ideal como la perfección, la justicia o la belleza o un ser antropomorfo capaz de juzgar todo lo que hacemos. Las primeras definiciones son hasta cierto punto comprobables, pues a través del uso del raciocinio nos podemos dar cuenta de su existencia, sin embargo como lo dije antes, el último concepto resulta tan descabellado que no se puede defender.
Si leemos un poco sobre filosofía, nos damos cuenta que hubo pensadores que en el plano ontológico usaron la idea del “dios” para explicar el ser y el origen de las cosas, Aristóteles por ejemplo decía todo podía explicarse por medio de las matemáticas y Heráclito afirmaba que los seres humanos debían seguir una ley natural: la razón.
Como se puede ver estos conceptos de “dios” son muy diferentes a los que nos enseña el Islam o el cristianismo, y nos muestran a “dios” no como un ser de cuentos de hadas que se preocupa por nosotros, que supuestamente nos cuida y nos castiga si hacemos algo mal, este “dios” que nos pintan estos y otros pensadores, se acerca más a la lógico, no puede pensar, no fue creado y es perpetuo, no le importamos porque solo es un orden, esta definición de dios está más acorde a la realidad. Dentro del plano de la metafísica también hay quien afirma que el universo tiene un orden perfecto y también hay quien dice que el universo es un choque de contrarios.
Aunque exista o no exista, según las razones que les expuse con anterioridad, el concepto de “dios” es algo caduco, del cual puede y debería prescindir la humanidad para lograr llegar a mejorar como sociedad.
Hasta aquí quedan claras las razones de mi ateísmo, el cual solo queda ahí, pues reducir toda mi personalidad a negar la existencia de “dios” resultaría tan dogmático como ser seguidor de cualquier religión.
Vengo de una familia católica, y fue educado en está fe, estoy bautizado, hice la primera comunión e inclusive he leído la biblia pues me parece excelente como literatura. Es por eso que conozco la religión católica igual o más que aquellos que dicen serlo, pero no siguen los preceptos de su fe y es por esto precisamente, que aparte de ateo soy antirreligioso.
La religión me parece una cosa terrible, pues no hay nada peor que alguien que no piensa por sí mismo, que no cuestiona y que se minimiza a tal grado de nombrarse convertirse en una oveja que forma parte del rebaño del “todopoderoso”. Eso sin contar que tanto el Islam como la iglesia católica tienen un concepto moralista bastante cerrado que atenta contra las libertades más esenciales.
Es probable que al leer todo lo anterior piense que no tengo un propósito en la vida, que soy solo un simple hombre de ciencia esclavo de la razón, o como me lo dijo alguien en una ocasión “esclavo de no ser esclavo”.
Soy una persona a la que sus pensamientos atormentan constantemente, sonara un poco presuntuoso, pero no falta un día en el que no deje de cuestionarme o criticar algo, e inclusive estuve a punto de estudiar filosofía, pero las cosas no se dieron.
Vengo de una familia de clase asalariada y en mi casa jamás se asomó la cultura por ningún lado, es por eso que ha falta de libros y unos padres que se preocuparan por cultivar mi pensamiento tuve que hacerlo con lo que tenía más a la mano. Entre la televisión, la música, mis experiencias personales y uno que otro libro que compre con el producto de mi trabajo forje mi propia filosofía, un pensamiento al que por su desorden y revoltura me gusta decir que es “de alcantarilla”.
Todo es un caos, nada tiene sentido. El universo se rige por un proceso dialectico, donde la unión de los opuestos y las contradicciones son la cotidianidad, sin embargo el “ser” es la mejor manifestación de la existencia, porque es materia consiente de si y para sí.
El ser humano es un ser que se crea así mismo, más allá de cualquier precepto científico, moral o religioso. Es por eso que toda persona tiene el derecho de hacer lo que se le pegue la gana, siempre y cuando no le quite el derecho a otro de hacer lo mismo.
Podría seguir escribiendo, pero el resultado final sería un escrito bastante tedioso, así que terminare ahí. Solo quiero decir para finalizar esto que los ateos (o al menos la mayoría), somos personas que piensan por sí mismas, con gustos diferentes y filosofías distintas, a los cuales lo único que nos une es eso: que la idea de “dios” nos parece algo ilógico y absurdo.
Se me estaba pasando, no soy un líder moral ni pretendo elevar mi ego haciendo esto, simplemente aprovecho el espacio que tengo, para responder de una vez por todas varias preguntas que los religiosos me han hecho alguna vez en la vida.
Dice que no puedo comentar groserias, entonces no puedo decir que soy ateo porque sufrí una hinchazón en los productos de ave de corral ???
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