De noticias, chucherías y esputos.

¡Vaya!, iniciando un nuevo año (ya casi es febrero, pero ¿a quién le importa? A mí no, por cierto.) y metiéndole "candela" al blog. Después de una cena de navidad frustrada gracias a mi neumonía galopante, adquirida justo un día antes, de un cambio de año cristiano que pasó sin pena ni gloria (bueno, pena sí, por que la neumonía estaba a todo lo que daba.), y dos semanas más de enfermedad, por fin me reintegro.

¡¡Noticias!!, dejé de jugar Mafia Wars en Facebook, de navidad me regalaron el videojuego "Assassin's Creed: Brotherhood" (Creo que ya me "casé" con ésa serie, es excelente como juego, divertida, presionante, entretenida e instructiva por su ambientación histórica.) de "medio cachete" o seminuevo, ya lo terminé dos veces, hay dos proyectos para trabajo en perspectiva, estoy aprendiendo el lenguaje de programación Java y estudiando el sistema operativo Android para teléfonos celulares, bajé 15 kilos gracias a la neumonía, tuve que cambiar mis hábitos alimenticios hacia el ovolactovegetarianismo debido a la acumulación de ácido úrico en mi pie derecho (Vaya pues, la famosa "gota", como la de los coroneles ingleses retirados de las novelas de Sir Arthur Conan Doyle y Agatha Christie. El tiempo comienza a cobrarse el kilometraje recorrido), continúo bajando de peso..., ¿algo que se me olvide?

Ahora sí estoy preocupado, la condición sicológica de mi madre empeora por momentos, se compone a ratos. Sospecho firmemente que tiene una especie de síndrome de Alzheimer ("El Alemán Cabrón", para los cuates), su memoria, antes prodigiosa, ahora es tan difusa como la línea que divide la política del crimen de lesa humanidad; pero finalmente, escogí cuidar de ella en sus últimos años para compensar el descuido que le tuve durante tanto tiempo y debo continuar con ésa tarea. Por solidaridad, amor filial, terquedad, por lo que ustedes quieran y manden, pero la vida está haciendo que reflexione algunas cosas que hice y que ahora debo retribuir.

Deploro tristemente el estado de violencia que se vive en la nación, pero a diferencia de mis compatriotas, yo sí entiendo dónde radica el problema. No es el Ejército, ni la Policía Federal Preventiva, ni la Marina quienes generan un clima de violencia tan palpable, aterrador y constante: Es el CRIMEN ORGANIZADO el que tiene al país (O quiere tener, por que el gobierno federal hace el esfuerzo de evitarlo, a diferencia de todos aquéllos que piensan que protestando hacen algo.) en sus garras, intentando campear a sus anchas para dominar al país, su territorio, ciudadanos, vidas y haciendas. No, perdón, pero no. Yo estuve, estoy y estaré a favor de luchar frontalmente contra el crimen organizado, no darles concesiones, no hacerles espacios, no permitir que gobiernen a la nación, no dejarlos que continúen ganando cantidades ingentes de dinero a costa del crimen, y que dicho sea de paso, éste dinero mal habido no genera empleo, ni inversiones, ni crédito, ni riqueza (salvo para los integrantes de las bandas delictivas, y además, no para todos.), en pocas palabras, es dinero muerto e inútil. Siendo francos, la situación actual del país se parece (y que me perdonen los colombianos actuales, pero es la realidad.) a la Colombia que aparecía en las noticias hace 15 años. Violencia, muerte, destrucción..., pero si los colombianos pudieron combatir eficazmente hasta reducir a la delincuencia organizada y al narcotráfico (y que conste, no los estoy menospreciando como nación ni como ciudadanos.), ¿por qué chingaos los mexicanos no podemos hacer lo mismo, ERRADICAR la violencia erradicando a los delincuentes de todo calibre, pelo y color? Simple: Individualmente (como siempre en la Historia nacional y la idiosincracia del habitante promedio de México) los mexicanos somos valientes, aguerridos, agresivos, "echadores" y hasta émulos de Superman..., pero en colectivo, somos agachones, cobardes, acomodaticios y timoratos. Y a ver, desniéguenlo.

¿Qué sucede cuando en Monterrey (por poner un ejemplo) se suscita una balacera entre dos bandas de CRIMINALES o entre una banda de CRIMINALES y el ejército? La población huye aterrada (Muy entendible, no se van a quedar a esperar que una bala perdida los convierta de ciudadano en estadística mortal.), se pone a salvo, chilla, llora, grita..., y después, EXIGE que se acabe la violencia, pero lo hace ¡¡¡AL GOBIERNO FEDERAL!!! O sea, queridos compatriotas, el hoyo está a la izquierda y ustedes están cagando a la derecha..., no es al gobierno a quien hay que pedirle que cese éste baño de sangre, muerte y violencia, es a los delincuentes a quienes hay que poner en su lugar. Pero no, diariamente los periódicos, noticieros, "radio pasillo" y demás están llenos de peticiones y exigencias a que pare la violencia, pero NADIE HACE NADA efectivo, salvo el gobierno federal, el ejército, la marina, la PFP, la PGR y hasta las policías estatales y municipales. ¡¡Ya basta de estupidez!!, si el "narco" de la comunidad paga un concierto de la Banda de Hule para entretenerte y ponerte a bailar, no se lo agradezcas con lisonjas y presunción, ¡¡DENÚNCIALO!! Si el capo que asola al estado le paga los XV años a tu hija fea con toda fastuosidad y boato, no le pagues con lealtad y silencio, una denuncia para que lo capturen, juzguen, condenen y hasta extraditen a dónde lo traten peor es más patriótico que andarlo presumiendo. ¿Conoces a un "mara", a un traficante de personas, a un secuestrador? ¡¡PUES NO SEAS PENDEJO!!, no te quedes callado, no te vanaglories de conocer a ésta escoria de la Humanidad, ¡¡DE-NÚN-CIA-LOS!!