¿Por qué no existe el dios judeocristiano y musulmán?
Científicamente: ¿por qué no existe Dios? Jamás se ha demostrado, ni se ha observado, ni se ha contrastado, ni se ha reducido a las matemáticas la existencia del dios judeocristiano y musulmán o de cualquier otro dios, sea cual fuere. El método científico, el único válido en nuestro poder para demostrar y adquirir conocimiento, se basa en el razonamiento para obtener hipótesis, en la observación y la medición para comprobarlas. Un experimento científico debe poderse repetir en cualquier lugar y con cualquier persona, en cualquier país o ciudad del mundo y comportarse igual, arrojar los mismos resultados INVARIABLEMENTE, casi casi como chiste “hasta arrojar la misma cantidad de burbujitas”. En primer lugar, jamás nadie nunca en ningún lugar se ha observado al dios judeocristiano y musulmán, o a Krishnáh o a Amaterasu o a Brahmah. No se puede hacer ciencia de algo que jamás se ha observado, es totalmente absurdo, es incongruente y fuera de proporción. Como el primer paso del método científico es la observación, y éste falla, no podemos seguir ni con mediciones (es absurdo intentar medir a cualquier dios si no le hemos observado ni sabemos qué es realmente), ni con hipótesis, ni con comprobaciones o reducción a leyes matemáticas.
Algo que no se ha observado directamente jamás, por principio científico (de ciencia pura, vamos) no existe. Si, pongamos un ejemplo, estoy solo en una habitación vacía y me dicen que hay otra persona junto a mí, esa persona no existe hasta que no se demuestre lo contrario. Es igual que en un Estado democrático: todos somos inocentes de algún crimen imputado hasta que no se demuestre su culpabilidad. Es más, ni siquiera la Ciencia nos aporta una mínima pista que nos permita sospechar que algún dios existe positiva e irrefutablemente. ¿De qué está hecho un dios? ¿Dónde se encuentra? Las respuestas religiosas comunes a estas preguntas son totalmente absurdas desde un punto de vista puramente científico. ¿Qué es eso de "espíritu"? El Universo sólo está hecho de materia y energía. Si los dioses no son materia ni energía, ¿de qué rayos están constituidos? "El dios se encuentra en todas partes" científicamente es absurdo, ya que sabemos que la materia es espacio casi totalmente vacío, que en el Universo existen inmensas e inconmensurables cantidades de espacio vacío, que la mal llamada “materia oscura” es aún una teoría sin mayor base que la imaginación, que aún los átomos tienen espacios “en blanco” que permiten algunas de sus propiedades..
Varios han sido los intentos de encontrar científicamente a los dioses (incluido, cómo no, el dios judeocristiano y musulmán) o a algo tangible, material, mesurable, comprobable más allá de toda duda relacionado con ellos, y se ha fracasado miserablemente. Una vez se pesó un cuerpo recién muerto, y otro vivo, para determinar la masa del espíritu o alma. Las diferencias no fueron apreciables. Las preguntas que antes se contestaban religiosamente (quién ha creado el Mundo, por qué vivimos, qué son los astros, etc.) ahora tienen respuesta puramente científica que por supuesto ha anulado a la mística (o supersticiosa, o religiosa..., como la queramos llamar). Sabemos incluso el origen del Universo y su fin (la teoría del Big-Bang, demostrada ya recientemente). Las únicas gran incógnitas en las cuales la religión aún se refugia son: ¿Qué había antes del Big-Bang y qué lo provocó? ¿Qué hay fuera de nuestro universo? ¿Quién rige y mantiene la armonía y la “pureza” del Universo? En casos de preguntas como ésta, la respuesta que los religiosos emiten es (al menos en nuestras sociedades basadas en el “rollo” europeo y americano) UNA SOLA: el dios judeocristiano y musulmán.
Pero nos damos cuenta, únicamente con conocer un poco de Física, que ambas preguntas (y por lo tanto sus respuestas) no son válidas ni caben hacérselas bajo ningún concepto basados en la racionalidad del conocimiento. La primera implica un concepto temporal (qué había antes del origen), y la segunda uno espacial (qué hay fuera del Universo). Nuestro universo tiene tres dimensiones espaciales y al menos una temporal, por ello los conceptos relacionados con el espacio y con el tiempo sólo tienen cabida en nuestro propio Universo. Si existen otros, sus dimensiones son totalmente inimaginables. Así pues, el tiempo y el espacio nacieron junto con el Universo, por eso no cabe preguntarse que había antes del origen (porque el tiempo no existía) o qué hay fuera del Universo (porque el espacio sólo existe aquí dentro). Así pues, vemos que efectivamente la Ciencia por fin, después de tantos milenios de existencia humana, ha anulado completamente a la Religión. Las personas que creen aún en algún dios son aquellas que necesitan la seguridad moral que un ser superior proporciona, o aquellas que no poseen los suficientes conocimientos científicos (que no por ello dejan de ser básicos y al alcance de todos). Ahora bien, la tercera cuestión pone a “alguien” a cargo de éste Universo, lo dota de poder y ley sobre la materia, la energía y sus posteriores y sucesivas transformaciones en una y otra; en éste caso, la siguiente pregunta que una persona medianamente racional y objetiva se haría es ¿y dónde está su oficina o despacho? Invariablemente, los religiosos esquivan o dizque contestan la pregunta diciendo “Está en todas partes”, pero como no se le ve ni se puede comentar o hacer una sugerencia sobre el comportamiento de lo que nos rodea, finalizamos con el concepto de que está dentro de nosotros. Y ése concepto es muy atemorizante para una persona racional, ya que implica que la manifestación divina depende del estado de humor de un individuo en particular; o que un “concepto personal” de un dios en particular, si se tiene la suficiente capacidad de convocatoria puede ser “transmitido” a una comunidad humana, expandirse y adueñarse de otros “conceptos personales” hasta anularlos y superarlos, como el caso de la religión católica aplastando a sangre y fuego y arrasando con las religiones animistas de la América precolombina, o la romana, griega, celta, celtíbera.
Además, la ciencia no nos deja ni siquiera un ápice de incertidumbre en el que refugiarnos. Todo se puede reducir a leyes matemáticas, todo se puede controlar. No hay nada extraño. Incluso detrás de fenómenos aparentemente caóticos se esconde siempre el orden. Sabemos que el Universo es finito en espacio y en tiempo. Conocemos todos los misterios de la vida, y no encontramos nada "raro" en nuestro interior... todo es química: el amor, los sentimientos, la razón, el movimiento, los pensamientos... todo se puede reducir a combinaciones y reacciones entre átomos. ¿Dónde está lo extraño? Sabemos de dónde venimos, y a dónde vamos. Conocemos la historia natural de nuestro planeta, y de sus especies animales (incluida la nuestra). Cada vez nos adentramos más en la física de lo muy pequeño (física cuántica) y seguimos sin encontrar nada que la ciencia no pueda analizar. ¿Dónde se encuentra, pues, su dios judeocristiano y musulmán? HA MUERTO BAJO EL PUÑAL DE LA CIENCIA.
Algo que no se ha observado directamente jamás, por principio científico (de ciencia pura, vamos) no existe. Si, pongamos un ejemplo, estoy solo en una habitación vacía y me dicen que hay otra persona junto a mí, esa persona no existe hasta que no se demuestre lo contrario. Es igual que en un Estado democrático: todos somos inocentes de algún crimen imputado hasta que no se demuestre su culpabilidad. Es más, ni siquiera la Ciencia nos aporta una mínima pista que nos permita sospechar que algún dios existe positiva e irrefutablemente. ¿De qué está hecho un dios? ¿Dónde se encuentra? Las respuestas religiosas comunes a estas preguntas son totalmente absurdas desde un punto de vista puramente científico. ¿Qué es eso de "espíritu"? El Universo sólo está hecho de materia y energía. Si los dioses no son materia ni energía, ¿de qué rayos están constituidos? "El dios se encuentra en todas partes" científicamente es absurdo, ya que sabemos que la materia es espacio casi totalmente vacío, que en el Universo existen inmensas e inconmensurables cantidades de espacio vacío, que la mal llamada “materia oscura” es aún una teoría sin mayor base que la imaginación, que aún los átomos tienen espacios “en blanco” que permiten algunas de sus propiedades..
Varios han sido los intentos de encontrar científicamente a los dioses (incluido, cómo no, el dios judeocristiano y musulmán) o a algo tangible, material, mesurable, comprobable más allá de toda duda relacionado con ellos, y se ha fracasado miserablemente. Una vez se pesó un cuerpo recién muerto, y otro vivo, para determinar la masa del espíritu o alma. Las diferencias no fueron apreciables. Las preguntas que antes se contestaban religiosamente (quién ha creado el Mundo, por qué vivimos, qué son los astros, etc.) ahora tienen respuesta puramente científica que por supuesto ha anulado a la mística (o supersticiosa, o religiosa..., como la queramos llamar). Sabemos incluso el origen del Universo y su fin (la teoría del Big-Bang, demostrada ya recientemente). Las únicas gran incógnitas en las cuales la religión aún se refugia son: ¿Qué había antes del Big-Bang y qué lo provocó? ¿Qué hay fuera de nuestro universo? ¿Quién rige y mantiene la armonía y la “pureza” del Universo? En casos de preguntas como ésta, la respuesta que los religiosos emiten es (al menos en nuestras sociedades basadas en el “rollo” europeo y americano) UNA SOLA: el dios judeocristiano y musulmán.
Pero nos damos cuenta, únicamente con conocer un poco de Física, que ambas preguntas (y por lo tanto sus respuestas) no son válidas ni caben hacérselas bajo ningún concepto basados en la racionalidad del conocimiento. La primera implica un concepto temporal (qué había antes del origen), y la segunda uno espacial (qué hay fuera del Universo). Nuestro universo tiene tres dimensiones espaciales y al menos una temporal, por ello los conceptos relacionados con el espacio y con el tiempo sólo tienen cabida en nuestro propio Universo. Si existen otros, sus dimensiones son totalmente inimaginables. Así pues, el tiempo y el espacio nacieron junto con el Universo, por eso no cabe preguntarse que había antes del origen (porque el tiempo no existía) o qué hay fuera del Universo (porque el espacio sólo existe aquí dentro). Así pues, vemos que efectivamente la Ciencia por fin, después de tantos milenios de existencia humana, ha anulado completamente a la Religión. Las personas que creen aún en algún dios son aquellas que necesitan la seguridad moral que un ser superior proporciona, o aquellas que no poseen los suficientes conocimientos científicos (que no por ello dejan de ser básicos y al alcance de todos). Ahora bien, la tercera cuestión pone a “alguien” a cargo de éste Universo, lo dota de poder y ley sobre la materia, la energía y sus posteriores y sucesivas transformaciones en una y otra; en éste caso, la siguiente pregunta que una persona medianamente racional y objetiva se haría es ¿y dónde está su oficina o despacho? Invariablemente, los religiosos esquivan o dizque contestan la pregunta diciendo “Está en todas partes”, pero como no se le ve ni se puede comentar o hacer una sugerencia sobre el comportamiento de lo que nos rodea, finalizamos con el concepto de que está dentro de nosotros. Y ése concepto es muy atemorizante para una persona racional, ya que implica que la manifestación divina depende del estado de humor de un individuo en particular; o que un “concepto personal” de un dios en particular, si se tiene la suficiente capacidad de convocatoria puede ser “transmitido” a una comunidad humana, expandirse y adueñarse de otros “conceptos personales” hasta anularlos y superarlos, como el caso de la religión católica aplastando a sangre y fuego y arrasando con las religiones animistas de la América precolombina, o la romana, griega, celta, celtíbera.
Además, la ciencia no nos deja ni siquiera un ápice de incertidumbre en el que refugiarnos. Todo se puede reducir a leyes matemáticas, todo se puede controlar. No hay nada extraño. Incluso detrás de fenómenos aparentemente caóticos se esconde siempre el orden. Sabemos que el Universo es finito en espacio y en tiempo. Conocemos todos los misterios de la vida, y no encontramos nada "raro" en nuestro interior... todo es química: el amor, los sentimientos, la razón, el movimiento, los pensamientos... todo se puede reducir a combinaciones y reacciones entre átomos. ¿Dónde está lo extraño? Sabemos de dónde venimos, y a dónde vamos. Conocemos la historia natural de nuestro planeta, y de sus especies animales (incluida la nuestra). Cada vez nos adentramos más en la física de lo muy pequeño (física cuántica) y seguimos sin encontrar nada que la ciencia no pueda analizar. ¿Dónde se encuentra, pues, su dios judeocristiano y musulmán? HA MUERTO BAJO EL PUÑAL DE LA CIENCIA.
Verás querido amigo, en realidad si existe un DIOS (Asi todo con MAYUSCULAS), recuerdas que dices que "supuestamente" el tan mentado DIOS es pura energia? pues aun en la gran NADA que es el ESPACIO EXTERIOR, existe infinidad de energia. Ohhh. Si KILOS y KILOS de energia cuantificable y MEDIBLE.
ResponderEliminarQUE ES LA VIDA Todos esos creyentoides que se hacen llamar CRISTIANOS, MUSULMANES y etc. pretenden explicar lo que es la vida, y todo lo reducen a una cosa eterea (No que como se escriba) que llaman alma y que segun ellos es un regalo del altisimo, tal vez eso te suene absurdo, pero no lo es... querido Amigo, los FANATICOS tienen una pizca de razón, la VIDA es un regalo del ALTISIMO, pero no es una cosa eterea que ellos mal llaman ALMA, sino que es algo PERFECTAMENTE MEDIBLE y TANGIBLE. ese regalo del ALTISIMO es esa energia que hizo que los primeros microorganismos pudieran empezar a dar señales de vida en aquel remoto charco de lodo primordial, y que actualmente NOS RODEA (No el charco, sino la ENERGIA).
Asi es querido amigo, la CHISPA de la vida (No es coca cola, que conste) fue ni nada más ni nada menos que la ENERGIA ELECTRICA, un RELAMPAGO de VIDA que cayó desde lo ALTISIMO de una NUBE y encendio la llama de la VIDA. Y dime una cosa... ¿Que DEIDAD de la antiguedad es representado con UN RELAMPAGO en cada MANO?.
Asi es... el TODOPODEROSO es ZEUS.
No cabe duda que los hermanos griegos no andan tan desencaminados despues de todo... ¿Verdad?.
(Por cierto, tengo que ir a pagar mi MANDA con mi Dios Zeus por los favores recibidos).
Excelente tu artículo, la forma lógica de aclarar una situación tan común como es el entorno del ser humano, deja sin sustento evidente la existencia de divinidades, si nuestros amigos fanáticos usaran un poco su lógica, podrian darse cuenta de lo absurdas que son sus creencias.
¿Cuál artículo? Es un texto que tenía por ahí olvidado y se me hizo buena idea publicarlo.
ResponderEliminarGracias por el comentario, y que Tiamat, dadora de vida y de muerte, te proteja.
Pos mira, articulo o texto, es tuya la autoria no? asi que es aplicable :þ
ResponderEliminarQue tal mi estimado chilanguin, adorador de los tacos que hay en cada estación del metro, igual que tu gato ronil, caray, que malo te ha salido ese gato, no es capaz de dar un simple recado, eso si, muy orgulloso de ser tu achichincle y lamebotas, eso hay que reconocérselo, pero en fin, eso no le quita lo pendejo.
ResponderEliminarBueno solo vengo a aclararte que no estoy enamorado de la usuaria Totus, suficiente tengo con que tengas colitis, para que ahora te vaya a dar un paro cardiaco por un ataque de celos; y tampoco estoy enamorado de ninguna mujer de tu familia, sepa Dios a quien te refieres con esta descripción "la vieja urraca cincuentona, virgen y tremendamente fanática del pensamiento mágico, místico, imaginario y "de-golpe-de-pecho", en un principio pensé que te referías a tu mamacita, pero ni modo que te hubiera tenido a los 6 años, eso seria mucha imaginación mía, luego pensé, se referirá a una de sus hermanas, pero pues tampoco, esta bien que de chiquito te hayan maltratado, pero tampoco es para que las describas así, por lo que me quedare con la gran duda, ya ni pex.
Por cierto siempre se nota tu forma corriente y vulgar de describir a las personas, que bueno que te olvidaste de tus raíces españolas y ahora hablas como todo un chilango, aunque he de decir que muchos, la mayoría de chilangos es gente TRABAJADORA, DECENTE y HONRADA, solo unos pocos ensucian el termino chilango, como tu comprenderás.
Bueno me despido, esperando ahora si, de una vez por todas, espero DIOS me haga ese favor, que ahora si ya no me menciones para nada, llevas un año prometiendo lo mismo y no mas no tienes fuerza de voluntad, yo creo ha de ser el azheimer, que te aqueja, pero trata de sobreponerte.
Que Dios te bendiga!!!!
PD no lei todo tu blog, porque no tengo tiempo, ni me interesa leer todas tus frustraciones
¿Y éste ente, quién es?
ResponderEliminarParece que no sabe tratar un tema adecuadamente. Y respetando la libertad de expresión, se lo publicamos, como de que no.
Que patetico eres Arturito, ¿tanto amor le tienes a Felipe que lo vienes a acosar a su blog?
ResponderEliminarYa superalo!!!
Consiguete una vida.
Que? ya tenemos un nuevo admirador Jelipe? O de donde sacaste al tal Juan (NO será el que BESÓ en el ZAGUAN?, ten cuidado que eso del SIDA ANDA GRUEXO).
ResponderEliminarPero, me imagino que por la redacción, la forma de expresión y el veneno escupido, ha de ser nuestro amigo el PIPOPE.
Pero lo que no entiendo es esa OBSESION EXTRAÑA que tiene sobre nosotros... Quizá le pasó lo mismo que a HITLER, su madre ha de haber sido VIOLADA por su patron CHILANGO y de ahi su ODIO racial hacia todos los capitalinos, esperemos que nunca llegue a presidente por que de lo contrario, va a hacer tambien campos de concentración, la raza ARIA PIPOPE.
(Lo más extraño es que el pobre PIPOPE ni siquiera sabe que es un CHILANGO y cataloga a todos los Defeños igual, pobre imbecil, lo que hace la televisión abierta)
Esperemos que le llegue pronto su prescripción de PROZAC, para que ya descanse de odios (Y que le dé una intoxicación medicinal igual que al Michael Jakson).