Del dolor y la angustia.
Relatoría de la resolución de una espalda desviada. de los 14 a los 48 años Yo sabía que tenía la espalda desviada con una escoliosis dorsolumbar no muy pronunciada y siempre bajo control, razón por la cual no pude entrar al Colegio Militar en su momento. Después del accidente donde el frente del automóvil que conducía fue convertido en charamusca gracias a la impericia y estupidez del chofer de una camioneta de traslado de valores, los dolores se hicieron más constantes, y ahora hasta con fechas, me dolía más cuando hacía calor… 7 de febrero de 2013. Todos los días al salir de la oficina, para aliviar la tensión que se acumula en la espalda después de más de 7 horas de estar sentado sin moverse, hacía un poco de calistenia para “tronar” la espalda, pero hoy fue diferente: Un dolor lacerante y continuo me ha azotado. Como pude me subí al transporte para regresar a casa. Rosario amorosamente me ha dado un masaje que alivia el dolor. 8 al 11 de febrero de 2013. El dolor me tiene en